Quién me conoce sabe que las fotografías posadas no es precisamente la parte mas importante de una boda, al menos para mí que me gusta dar la máxima importancia a las fotografías del momento. Javi & Sheila querian algo diferente, arriesgado un lugar distinto.
Tras varios dias pensando donde ir me vino a la cabeza un internado que hay abandonado en Izarra un pueblito de Vitoria. Un lugar donde parece que el tiempo y la naturaleza engulle un lugar tan imponente como este.
Ha sido sensacional, trabajar con una pareja la cual se arriesga para obtener resultados diferentes. Personalmente como fotógrafo de boda, ha sido sensacional poder realizar una sesión en un lugar tan complicado. Sin duda me ha exigido mucho.
Os dejo con las fotografías de sus sesion, espero que os gusten!!
Espectaculares vaya colores y luces bravo